domingo, 4 de julio de 2010
La Danza del Vientre durante el embarazo
Si nos transportáramos a uno de los orígenes de esta hermosa danza, podríamos llegar a ver a un grupo de mujeres alrededor de una mujer a punto de dar a luz, haciendo movimientos pélvicos y de vientre todas en unísono. La mujer, imitando estos movimientos que además habría aprendido desde niña, puede dar a luz con toda facilidad e incluso sin dolor, seguido de los zagarits (gritos agitando la lengua) de las mujeres y los bailes de las mismas celebrando este hermoso milagro de la vida.
Si,
Resulta que luego de que los países árabes se volvieran monoteístas, estas ceremonias religiosas fueron vistas como paganas y quedaron prohibidas, por lo que luego se convirtieron solo en danzas de diversión y celebración, tanto como folclor. Sin embargo, en muchas partes del Medio Oriente, donde la medicina de occidente no ha llegado aún, las mujeres se reúnen alrededor de una mujer en el parto y comienzan a hacer ciertos movimientos, animando a la mujer encinta a hacer lo mismo para facilitar la labor. Aquellas mujeres ya conocen esos movimientos, por lo que sus músculos son fuertes y están bien preparados para dar a luz.
Aunque los hombres estaban excluidos de este ritual, ellos también tendrían sus danzas de celebración y bailaban entre ellos, siendo las mujeres también recluidas de esta fiesta.
Los movimientos practicados en estos rituales eran aquellos que ahora tienen nombres, como “belly roll (olitas de vientre)”, “camellos (en todas su variedades)”, “flutters (entrar y sacar el vientre rápidamente)”, ondulaciones en general.
Sabiendo esto, nos emociona pensar que en realidad nuestra hermosa danza nos puede ayudar en algo más: a dar a luz.
Este reportaje es para todas las mujeres, aquellas que serán madres, aquellas que lo son. Aquellas que son profesoras, aquellas que son bailarinas. Te invitamos a seguir celebrando con la danza árabe, esta vez, celebrando la vida.
Aunque los hombres estaban excluidos de este ritual, ellos también tendrían sus danzas de celebración y bailaban entre ellos, siendo las mujeres también recluidas de esta fiesta.
Los movimientos practicados en estos rituales eran aquellos que ahora tienen nombres, como “belly roll (olitas de vientre)”, “camellos (en todas su variedades)”, “flutters (entrar y sacar el vientre rápidamente)”, ondulaciones en general.
Sabiendo esto, nos emociona pensar que en realidad nuestra hermosa danza nos puede ayudar en algo más: a dar a luz.
Este reportaje es para todas las mujeres, aquellas que serán madres, aquellas que lo son. Aquellas que son profesoras, aquellas que son bailarinas. Te invitamos a seguir celebrando con la danza árabe, esta vez, celebrando la vida.
- El ejercicio durante tu embarazo:
Antes de revisar lo concerniente a bailar durante tu embarazo, debemos concentrarnos en el ejercicio en general. El estar activa durante el embarazo ayuda mucho a tu cuerpo beneficiándolo enormemente. El ejercicio te ayudará a mantener tu cuerpo más fuerte. Te ayudará a fortalecer huesos y músculos. Tendrán menos problemas tus articulaciones, tendones, intestinos, estómago y circulación.
Además, ayudará a que mantengas un peso normal y no subas más de lo que debieras. El tener un bebé es algo muy demandante físicamente, el tener a luz requiere de muchísima energía, especialmente si eres primeriza o si han pasado años entre tus embarazos.
Además, ayudará a que mantengas un peso normal y no subas más de lo que debieras. El tener un bebé es algo muy demandante físicamente, el tener a luz requiere de muchísima energía, especialmente si eres primeriza o si han pasado años entre tus embarazos.
Además, el ejercicio te hará sentir mejor en una época en que tu cuerpo experimenta muchos cambios. Es por esto que es muy buena idea el mantenerse en forma durante el embarazo.
El Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos y otras instituciones han establecido los siguientes puntos benéficos del ejercitar durante tu embarazo:• Reduce el dolor de espalda.
• Reduce la constipación (problema muy común durante el embarazo).
• Incrementa la energía y estimula
• Sube el ánimo y balancea tus cambios de ánimo.
• Mejora tu postura.
• Te ayuda a fortalecer tus músculos y te da fuerza.
• Te ayuda a dormir mejor.
• Te da control y ayuda a tu auto-confianza.
• Te da tiempo para ti misma, para hacer cosas por ti misma.
• Te ayuda a socializar e incluso a compartir experiencias con otras mujeres embarazadas o que ya son madres.
• Te ayudará en el parto, será más rápido y menos inducido en caso de necesitarlo.
• Será más fácil para ti volver a tu peso ideal.
• Hay menos probabilidades de que necesites una cesárea e incluso de que necesites anestesia.
• Segregas endorfinas, que te ayudan a ser más feliz y a sentir menos dolor (esta hormona es una anestesia natural).
Recuerda que el ejercicio durante tu embarazo es para hacerte las cosas más fáciles y seguras, sobre todo para tu bebé y tu mismo cuerpo. No debes sobre-exigirte ni hacer ejercicio sólo para no subir de peso. Escucha a tu cuerpo.
Antes que todo, debes recurrir a tu doctor. Revisa tu historial médico. Pon atención a puntos importantes como por ejemplo:
- Si has sido muy sedentaria durante toda tu vida.
- Si has fumado y tomado alcohol.
- Si has tenido pérdidas o partos prematuros.
- Ten aún más cuidado si es que estás teniendo gemelos o más.
- Si tienes problemas a las articulaciones y/o huesos.
- Si tienes problemas cardiacos.
- Si te sube la presión por estar embarazada.
- Si tienes diabetes o anemia.
Todos estos puntos debieran siempre ser el foco de las preguntas a tu médico en caso de que quieras ejercitarte sanamente y sin riesgos durante tu embarazo. En el caso de
La danza árabe es suave y de bajo impacto, por lo que es un muy seguro ejercicio durante tu embarazo. Lo importante es que escuches a tu cuerpo y tengas sentido común. Quizás no querrás hacer fuertes solos de percusión al comienzo de tu embarazo o al octavo mes! Pero lo bueno de nuestra danza es que todos los movimientos se pueden hacer con extrema suavidad. Un solo de percusión no tiene porque ser agresivo, verdad? Así ocurre con el resto.
Bueno, también debes tomar en cuenta que una cosa es hacer clases o continuar tomando clases y otra muy distinta es hacer shows. Si eres una bailarina profesional, recuerda que el ejercicio no debe ser de gran impacto, con respecto especialmente a los giros, saltos, percusiones, etc...
2. La Danza en Trimestres:
El siguiente es un programa creado porla BBC de Londres para el ejercicio durante las embarazadas. Apliquémoslo a la danza:
El siguiente es un programa creado por
Primer Trimestre:
-Si estabas en clases de danza antes de quedar embarazada, continúa normalmente. Si es ahora cuando empezarás a bailar, comienza muy suavemente.
-No subas mucho tu temperatura.
-Trabaja tu postura, ahora más que nunca. Como bailarina debieras tener una buena postura, sin embargo, es hora de trabajarla aún más ya que luego será fundamental para no lesionar tu espalda con el peso de tu bebé.
-Si estabas en clases de danza antes de quedar embarazada, continúa normalmente. Si es ahora cuando empezarás a bailar, comienza muy suavemente.
-No subas mucho tu temperatura.
-Trabaja tu postura, ahora más que nunca. Como bailarina debieras tener una buena postura, sin embargo, es hora de trabajarla aún más ya que luego será fundamental para no lesionar tu espalda con el peso de tu bebé.
-Si eres bailarina, tienes mucha fuerza en tus músculos abdominales. Tanto si eres o no bailarina, sigue ejercitándolos con los ochos, los camellos, los belly rolls (ondulaciones de vientre).
Segundo trimestre:
-Suaviza más aún tus actividades pero no dejes de disfrutar la danza. Como se dijo anteriormente, esta danza es maravillosa ya que todo puede hacerse con suavidad y cuidado y sigue siendo igual de hermosa. No es necesario dejar de bailar!
-No hagas abdominales
Tercer trimestre:
-Aquí la postura es vital. Continúa trabajando en tus músculos abdominales. Hay algunos ejercicios pélvicos que las matronas o los kinesiólogos te pueden dar para seguir. Muchas matronas, nacionales y extranjeras, enseñan ejercicios que de hecho son utilizados en la danza del vientre! De todas maneras hay otros que también pueden servir de gran complemento para tu baile.
-Invierte en un buen sostén deportivo para embarazadas.
Debes dejar de hacer cualquier actividad física, incluido el baile, y consultar inmediatamente con un médico si es que:
-Despides algún fluido
-Empiezas a sangrar
-Te sientes mareada, con náuseas y/o te falta el aliento
-Sientes dolor en el abdomen o el pecho
-Tienes contracciones
-No sientes a tu bebé moverse.
. Guía para bailar durante tu embarazo:
-Toma mucho líquido: antes, durante y después del baile. Recuerda que especialmente durante el primer trimestre, tu temperatura corporal no debe subir en exceso. El baile te hará transpirar, por lo que debes tomar agua para reponer el líquido que estás perdiendo.
-Siempre incluye un calentamiento inicial antes de la sesión de baile y un “cool down”(elongación final) después de terminar la clase, ojalá que incluyan ejercicios de relajación con la respiración. Si eres alumna, tu profesora debiera hacerlo incluso si no tiene alumnas embarazadas. De todas maneras, infórmale sobre tu condición.
-Si tomas una clase a la semana regularmente, ojalá sigas haciéndolo así e incluso podrías aumentar la regularidad o proponerte practicar en casa, ya que lo ideal es que el ejercicio sea de tres veces a la semana. Sin embargo, si tu actividad física era casi nula, se debieras tener especial cuidado en las primeras 26 semanas del embarazo ya que la placenta antes de esto es aún se está desarrollando.
-Excluye cualquier movimiento que pueda hacerte perder el equilibrio, como los giros con el velo, por ejemplo, ya que es altamente riesgoso enfrentar una caída. Recuerda que llevas otro peso ahora, por lo tanto tu centro de gravedad no es el mismo.
-Ocupa ropa cómoda, con un buen sostén deportivo.
-No te recuestes en tu espalda por mucho rato especialmente luego de tu primer trimestre ya que el peso del bebé puede hacerte daño en la espalda y además le estás reduciendo el paso de sangre y oxígeno a tu bebé al presionar la vena cava.
-Monitorea constantemente las palpitaciones de tu corazón. Si no puedes mantener una conversación cómodamente, entonces debes bailar más lentamente.
-Deja de bailar si presentas alguno de los síntomas dichos en la sección anterior.
-No inclines mucho las rodillas, ya que tu cuerpo está segregando la hormona “relaxina”, que ablanda tus huesos para dar paso al bebé en tu útero, por lo que tus articulaciones y huesos están más expuestos a lesiones.
-Debes mantener una dieta balanceada.
4. Los beneficios:
Al recopilar información para hacer este reportaje, me encontré con muchas bailarinas nacionales y extranjeras que han sido madres durante sus carreras como bailarinas. Por supuesto, todas ellas han preguntado a su doctor y han tenido excelentes respuestas por parte de ellos. Muchas cuentan sus propias experiencias y los beneficios que la danza del vientre les ha reportado a la hora de tener a sus bebés.
Inmaculada García, profesora española de danza árabe, es también enfermera y ayuda a un grupo de matronas a enseñarles algunos movimientos de danza del vientre para que a su vez ellas les enseñen a las mujeres embarazadas, como ejercicios formales para la preparación del parto. Ella misma tiene dos hijos y recuerda sus partos como rápidos, sin dolor y con excelente dilatación. Todo esto es porque la danza del vientre fortalece justamente los músculos que participan a la hora de dar a luz. Este fortalecimiento no es algo que se pueda ver por el exterior, aunque sepamos que la danza incluso nos ayuda a modelar nuestro cuerpo. Por otro lado, estos movimientos no solo ayudan al parto sino también a que el feto esté bien sujeto. Como estos músculos no se utilizan normalmente, se atrofian y así, quien practica danza árabe puede evitar que esto ocurra.
La profesora Keti Sharif de Australia dice sus alumnas que fueron por segunda vez madres, luego de haber tomado clases de danza, reportan el haber tenido un mejor parto, más fácil y más relajado. Además, se habían puesto en forma mucho más rápido, la incontinencia casi no se presenta ya que los músculos pélvicos están fortalecidos y la condición general de saludo es mucho mejor con clases regulares de danza. La danza árabe y el embarazo están inextricablemente conectados y lo han estado por siglos.
-Excluye cualquier movimiento que pueda hacerte perder el equilibrio, como los giros con el velo, por ejemplo, ya que es altamente riesgoso enfrentar una caída. Recuerda que llevas otro peso ahora, por lo tanto tu centro de gravedad no es el mismo.
-Ocupa ropa cómoda, con un buen sostén deportivo.
-No te recuestes en tu espalda por mucho rato especialmente luego de tu primer trimestre ya que el peso del bebé puede hacerte daño en la espalda y además le estás reduciendo el paso de sangre y oxígeno a tu bebé al presionar la vena cava.
-Monitorea constantemente las palpitaciones de tu corazón. Si no puedes mantener una conversación cómodamente, entonces debes bailar más lentamente.
-Deja de bailar si presentas alguno de los síntomas dichos en la sección anterior.
-No inclines mucho las rodillas, ya que tu cuerpo está segregando la hormona “relaxina”, que ablanda tus huesos para dar paso al bebé en tu útero, por lo que tus articulaciones y huesos están más expuestos a lesiones.
-Debes mantener una dieta balanceada.
4. Los beneficios:
Al recopilar información para hacer este reportaje, me encontré con muchas bailarinas nacionales y extranjeras que han sido madres durante sus carreras como bailarinas. Por supuesto, todas ellas han preguntado a su doctor y han tenido excelentes respuestas por parte de ellos. Muchas cuentan sus propias experiencias y los beneficios que la danza del vientre les ha reportado a la hora de tener a sus bebés.
Inmaculada García, profesora española de danza árabe, es también enfermera y ayuda a un grupo de matronas a enseñarles algunos movimientos de danza del vientre para que a su vez ellas les enseñen a las mujeres embarazadas, como ejercicios formales para la preparación del parto. Ella misma tiene dos hijos y recuerda sus partos como rápidos, sin dolor y con excelente dilatación. Todo esto es porque la danza del vientre fortalece justamente los músculos que participan a la hora de dar a luz. Este fortalecimiento no es algo que se pueda ver por el exterior, aunque sepamos que la danza incluso nos ayuda a modelar nuestro cuerpo. Por otro lado, estos movimientos no solo ayudan al parto sino también a que el feto esté bien sujeto. Como estos músculos no se utilizan normalmente, se atrofian y así, quien practica danza árabe puede evitar que esto ocurra.
La profesora Keti Sharif de Australia dice sus alumnas que fueron por segunda vez madres, luego de haber tomado clases de danza, reportan el haber tenido un mejor parto, más fácil y más relajado. Además, se habían puesto en forma mucho más rápido, la incontinencia casi no se presenta ya que los músculos pélvicos están fortalecidos y la condición general de saludo es mucho mejor con clases regulares de danza. La danza árabe y el embarazo están inextricablemente conectados y lo han estado por siglos.
4.2. Beneficios Emocionales:
Por otra parte, hay que considerar los aspectos “no físicos” del baile durante el embarazo. Estos son los aspectos sicológicos. Muchas bailarinas admiten que su autoestima estaba muy frágil ya que sus cuerpos sufrían muchos cambios. Algunas de ellas tenían estrías, lo que las hacía sentirse avergonzadas de aquellas marcas justamente en el vientre, que es el principal instrumento de nuestra danza. Sin embargo, muchas de estas bailarinas, gracias a la danza, sintieron las estrías como marcas de vida, marcas de experiencia, marcas de ser mujer. Y continuaron bailando con sus “vientres en alto”. La danza del vientre ayuda a mejorar la autoestima de cualquier mujer, esté o no embarazada.
Si eres profesora sólo pregúntate cuántas alumnas han llegado porque quieren subir su autoestima o cuántas de ellas la han subido sin siquiera habérselo cuestionado antes. Esta es una danza tan femenina que nos hace sentirnos hermosas en todo momento y, dando especial énfasis a aquellas futuras madres, ayuda a establecer y balancear los estados de áni
Por otra parte, hay que considerar los aspectos “no físicos” del baile durante el embarazo. Estos son los aspectos sicológicos. Muchas bailarinas admiten que su autoestima estaba muy frágil ya que sus cuerpos sufrían muchos cambios. Algunas de ellas tenían estrías, lo que las hacía sentirse avergonzadas de aquellas marcas justamente en el vientre, que es el principal instrumento de nuestra danza. Sin embargo, muchas de estas bailarinas, gracias a la danza, sintieron las estrías como marcas de vida, marcas de experiencia, marcas de ser mujer. Y continuaron bailando con sus “vientres en alto”. La danza del vientre ayuda a mejorar la autoestima de cualquier mujer, esté o no embarazada.
Si eres profesora sólo pregúntate cuántas alumnas han llegado porque quieren subir su autoestima o cuántas de ellas la han subido sin siquiera habérselo cuestionado antes. Esta es una danza tan femenina que nos hace sentirnos hermosas en todo momento y, dando especial énfasis a aquellas futuras madres, ayuda a establecer y balancear los estados de áni
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